tarde de domingo, y un poquito de lluvia por aquí.
tarde de domingo, y un poquito de melancolía por allá.
caminando pisando charquitos, mirándome las zapatillas.
pensando que podría estar mejor.

preguntándome porque lloré tanto con la película del viernes a las 4 de la mañana, mientras comía helado de frambuesa.
está bien que era triste. pero me di cuenta de muchas cosas.
la que más me sorprendió fue haber sentido algo parecido a como se debe sentir que se muera mi padre.
es la segunda vez que me pasa.
la primera vez fue hace varios años que lo soñé, y me desperté con la sensación de que había muerto, y que yo podría haberlo evitado, yo lo ví caerse junto a la puerta del garage.
no podía parar de llorar, ni en el sueño ni cuando me desperté.

no se cómo describir las cosas que me unen con él.
pero es destacable ver mi cara y mi satisfacción cuando hablo de este hombre tan alto y con voz tan grave.
cuánto más adulta me vuelvo, más se siente ese vínculo.
son códigos, actitudes que me copié de a poco y son parte de mí. yo elegí tenerlas. exprimí a mi padre durante los últimos años más conscientes de mi vida y le robé lo que más admiraba.
y cuando nos ponemos a hablar serios, y evitamos los chistes fáciles y tontos, adoro la forma de hablar, las cosas que dice, el hecho de que siempre tiene un punto, pero te lleva de paseo por cualquier lado antes de decir lo fundamental. y a mi me causa risa. me da ternura.
y yo le digo hijo a veces. o le digo chicho. a él también le causa risa.
él también tarda mucho en caer en todo.
qué triste estaba cuando se dió cuenta que me iba a vivir sola. pero después verlo poniendo los portalámparas, intentando pelar un cable (lo terminé haciendo yo)...
a veces me abraza con mucha timidez, o me agarra la mano sobre la mesa, y me da una tosti con queso.
siempre le pregunto si el queso es picante, porque a mi no me gusta, y él responde: "no, comé tranquila que es suavecito"...generalmente me quema el alma su quesito suave y tengo ganas de revoleárselo por la cabeza, pero no puedo, le pido otro y lo como con tiempo, para que no se sienta mal.